Afín de construir una paz duradera en Colombia, un programa de cooperación para el desarrollo entre los sindicatos de docentes canadienses y colombianos ha ayudado a desarrollar círculos pedagógicos y el programa del proyecto Escuelas como zonas de paz. En 2014, el principal sindicato de educación de Colombia, la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (FECODE), solicitó el apoyo de los sindicatos canadienses afiliados a la Internacional de la Educación (IE). Requirieron este apoyo para desarrollar círculos pedagógicos y Escuelas como zonas de paz (véase abajo), con el objetivo de construir una paz duradera en Colombia.
Afín de construir una paz duradera en Colombia, un programa de cooperación para el desarrollo entre los sindicatos de docentes canadienses y colombianos ha ayudado a desarrollar círculos pedagógicos y el programa del proyecto Escuelas como zonas de paz.
En 2014, el principal sindicato de educación de Colombia, la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (FECODE), solicitó el apoyo de los sindicatos canadienses afiliados a la Internacional de la Educación (IE). Requirieron este apoyo para desarrollar círculos pedagógicos y Escuelas como zonas de paz (véase abajo), con el objetivo de construir una paz duradera en Colombia.
Tres sindicatos canadienses respondieron positivamente a su llamado para desarrollar este proyecto pedagógico alternativo: la Centrale des syndicats du Québec (CSQ), la Ontario Secondary School Teachers’ Federation (OSSTF) y la British Columbia Teachers’ Federation (BCTF), coordinados por CoDev, un organismo de cooperación internacional.
Artículo de la Internacional de la Educación, disponible en su sitio web.
Dificultades para extender los círculos pedagógicos
El proyecto inicial estuvo vigente entre 2014 y 2017 y facilitó el desarrollo de círculos pedagógicos en 10 provincias. En vista del éxito de esta primera etapa, un segundo proyecto permitió la extensión de estos círculos pedagógicos a las 32 provincias del país.
Sin embargo, fueron numerosos los obstáculos observados para la implementación de estos círculos pedagógicos:
• El plan de estudios es exigente, es preciso cumplir las horas de clase y no queda tiempo para la discusión en el contexto de los círculos pedagógicos.
• Algunas localidades no dieron permiso a los/las docentes para reunirse en círculos pedagógicos. Sin embargo, la FECODE hizo hincapié en que los/las docentes son independientes y tienen el derecho de reunirse y discutir los temas que deseen.
• Algunos/as docentes no se atreven a hablar de democracia por temor a ser considerados opositores al régimen.
• Después de las recientes elecciones de la FECODE, los representantes recién electos tienen que recomenzar todo desde cero.
Visita de evaluación
Del 10 al 17 de noviembre de 2019, una delegación compuesta por ocho representantes de los tres sindicatos donantes, CoDev y la Canadian Teachers’ Federation (CTF) visitó Colombia para evaluar los progresos del proyecto Escuelas como zonas de paz.
Se reunieron con las Ejecutivas de FECODE y la Central Unitaria de Trabajadores de Colombia, investigadores del CEID (Centro de Investigación de FECODE) y un investigador de la Fundación para Escuelas de Paz. Posteriormente, la delegación se dividió en tres grupos y visitó tres ciudades: Cúcuta, Montería y Facatativá. Por últimos, se celebraron reuniones de información en Bogotá con los miembros del Comité Ejecutivo de FECODE.
Estas visitas de campo establecieron lo siguiente:
• Las escuelas son víctimas de la guerra. En particular, se observó la presencia de minas terrestres en los terrenos escolares, así como una presencia militar o paramilitar en las escuelas.
• Las escuelas son víctimas de las políticas neoliberales. Ha habido una desinversión en la educación para apoyar el esfuerzo de guerra, pagar la deuda externa del país y cubrir su déficit fiscal. La educación ha dejado de considerarse un derecho fundamental y está siendo explotada.
• La victimización de los/las docentes. Un total de 1.075 docentes han sido asesinados/as, 1.800 desplazados/as, 50 han desaparecido, 70 han sido exiliados/as y 60.000 han sido amenazados/as.
A juicio del presidente de la FECODE, Nelson Javier Alarcón Suárez, la continuación del proyecto Escuelas como zonas de paz es de crucial importancia para el proceso de paz y reconciliación. Su importancia es todavía mayor en las zonas en las que han sido asesinados numerosos/as docentes y en donde las escuelas han sido blanco de la violencia. Por lo tanto, se precisa la solidaridad internacional con la FECODE para continuar este proyecto.
Los cinco pilares de las escuelas como zonas de paz
El proyecto pedagógico alternativo de las Escuelas como zonas de paz se sustenta en cinco pilares, a saber:
1. Democracia escolar
2. Los programas escolares deben estar vinculados a las realidades de cada comunidad.
3. Vínculos más estrechos entre las escuelas y sus comunidades.
4. Condiciones para la enseñanza, a saber, condiciones de vida, condiciones de trabajo y condiciones profesionales para los/las docentes
5. Memoria, identidad y reparación
La FECODE y el CEID señalan que estos métodos pedagógicos alternativos se basan en métodos desarrollados por investigadores/as latinoamericanos, incluido Paolo Freire.
Se solicita apoyo para continuar
El segundo ciclo de tres años del proyecto Escuelas como zonas de paz finaliza en marzo de 2020. Dado su éxito e impacto, la FECODE pide apoyo para continuar el proyecto durante otros tres años. Presentará una solicitud a CoDev para que sea evaluada por los tres sindicatos canadienses participantes en el proyecto: CSQ, OSSTF y BCTF.
Para la FECODE, el proyecto le ha aportado un beneficio adicional al ayudarle a conservar a sus miembros en un período de fuerte declive de la representación sindical en Colombia. Esta disminución se debe principalmente a las amenazas de que son víctimas los sindicalistas, así como a la violencia en su lugar de trabajo.
En términos cuantitativos, la evaluación realizada por FECODE arroja como resultado, entre otros:
• La realización de ocho seminarios de formación durante los tres años.
• Se han anotado 245 experiencias de Escuelas como zonas de paz.
• Ha aumentado la participación en los círculos pedagógicos.
Sin embargo, la FECODE subraya que una evaluación cuantitativa por sí sola no refleja todas sus aportaciones. La evaluación cualitativa es, en su opinión, mucho más importante, incluso si resulta difícil evaluar un enfoque como el de las Escuelas como zonas de paz, o el uso de métodos pedagógicos alternativos.
IE: una educación de calidad, esencial para sociedades sanas y sostenibles
La IE ha apoyado iniciativas como la de Escuelas como zonas de paz. «Una educación de calidad basada en los valores puede aportar una contribución inestimable y el aula siempre será el lugar más idóneo para construir la tolerancia y paz», señaló David Edwards, Secretario General de la IE.
“La misión principal de la educación debería ser estudiar el mundo a la luz de la siguiente pregunta: ¿Cómo podemos vivir juntos en un mundo compartido? Cada programa debe diseñarse en función de esta misión, para que podamos contribuir a una sociedad pacífica».
Resolución
La Resolución sobre: educación, paz y justicia en zonas de conflictos, aprobada en el 7º Congreso Mundial de la IE en Ottawa, Canadá, en julio de 2015, también reconoce que: “La educación es un derecho humano y un bien público. Las escuelas y universidades deberían ser lugares donde la enseñanza y el aprendizaje se desarrollasen en entornos seguros. Se trata de hechos fundamentales que suscribe la IE”.
Asimismo, la resolución destaca que “Los estudiantes y docentes que residen en zonas de conflicto bélico son testigos de la violencia a diario. Las escuelas y universidades deberían ser refugios seguros, donde las comunidades puedan trabajar para conseguir un futuro mejor”.
Por ende, denuncia el hecho de que “en muchos lugares estas instituciones se han convertido en el objetivo de ataques violentos por motivos políticos, militares, ideológicos, sectarios, étnicos, religiosos o criminales».
Por este motivo, la resolución pide que se “inste a sus afiliados a presionar a sus gobiernos para que adopten y respalden las directrices internacionales para la protección de escuelas y universidades ante un uso militar en caso de conflicto armado”.
Del mismo modo, la IE alienta a todos sus miembros a apoyar su Declaración, «Las escuelas deben ser zonas de paz».